Una mirada y una sonrisa. Fue todo lo que le hizo falta para volverme loca. ¿Cómo es posible? me pregunto todavía.
Su nombre rebolotea en mi cabeza ansioso por que un día pueda escapar por mis labios. Cierro los ojos y allí está.
Como un tonto presentimiento, de esos que suelo tener, sé que debo intentarlo. Pero como mi tonta conciencia me suele decir..."no corras".
¿Por qué yo? ¿Por qué no la chica que tenía detrás o la de mi derecha? ¿Por qué él?
Una mirada y una sonrisa fue todo lo que le hizo falta para enamorarme.
1 comentari:
Una mirada y una sonrrisa, es la manera mas linda y mas traicionera de enamorarse...
y la mas crónica...
saludos... me encantó el nombre de tu blog
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