divendres, 9 de maig del 2008

Jugando.


Jugando...a un juego que ambos tenemos prohibido. Alargando las horas, repitiendo lo mismo hasta desgastar nuestras mismas palabras. Te disfruto con cada mirada, aun sabiendo que estoy inventando toda una vida de argumentos falsos para pasar mis últimas horas contigo. En realidad ambos sabemos que tú haces lo mismo.
Jugando...con un mapa entre las manos. Tú me recomiendas el camino largo...ya que este es el más divertido, el más fructuoso. No sabes qué estás diciendo...no quiero que sepas de qué hablo, porque yo ya estoy jugando. El objetivo es "el punto", aquel doblemente rodeado. El camino largo es lento e
irresistible, en cambio el corto es fuerte, duro e irreemplazable. Me aconsejas sin saber qué es cada cosa. Yo no hago más que decirte que el punto lo es todo, tú estás cada vez más intrigado sabiendo que estoy jugando contigo. Te gusta, en el fondo te encanta...y eso es lo peor. En la boca del estómago me nace el deseo de gritar: "TÚ ERES AMBOS CAMINOS, TÚ ERES EL OBJETIVO, EL PUNTO, TÚ LO ERES TODO." Pero no lo hago, ya que así llegaría al punto sin pasar por los caminos, así llegaría a ti desperdiciando momentos que ahora podríamos tener.
Jugando...ambos jugando, el uno con el otro. Yo me dejo jugar, sabes que en el fondo me encanta. Tú te dejas jugar, sabes que no
deberías, pero lo deseas con todas tus fuerzas.
Jugando...a lo que no podemos.

2 comentaris:

Óscar Sejas ha dit...

Bueno, como sabiamente suele decirse, en el amor y en la guerra todo vale.

Cualquier juego es una oportunidad de conocerse y de acercarse un poquito más, intentando alcanzar una meta común.

Suerte en el camino y que todo salga bien.

Un saludo y un placer visitarte.

Inelegante ha dit...

Jugar a lo que no se puede... es adictivo
Saludos, me encantó el blog, lo visitaré seguido...
saludos, un placer
bye.-